Euskadi es una Comunidad de reducido tamaño, con un elevado PIB, una cultura empresarial avanzada, unas capacidades científico-tecnológicas destacables, y un liderazgo institucional integral. Si a eso añadimos un alto nivel de vertebración e interrelación social y unos objetivos globales socializados estamos cerca de una Comunidad que trabaja en Red, de un entorno ideal para impulsar la Eco-innovación. La Eco-innovaciónentendida como “cualquier forma de innovación que reduce los impactos ambientales y optimiza el uso de los recursos” y que únicamente puede desplegarse con toda su fuerza desde la sólida colaboración entre la Administración que establece el marco que genera la demanda ambiental y el sector privado que traslada al mercado la eco-innovación generando riqueza.